En el mundo corporativo, hay realmente dos significados diferentes al término conference call. Uno se refiere a los aspectos tecnológicos mientras que el otro se centra más en los aspectos financieros. Ambas definiciones son importantes cuando se intenta se trata de llevar un negocio a distancias largas. El primero significado de conference call debería ser más familiar para aquellos que pasan al menos parte del día en reuniones de negocios.
Antes de la llegada de las telecomunicaciones que tenemos hoy en día, si una persona en Barcelona quería hablar de un proyecto con otra en Dublín, tenía que reservar una sala, pagar por ella y coger un avión para hacer dicha reunión.
Según las comunicaciones de larga distancia fueron mejorando, el concepto de las conference calls se fueron integrando cada vez más en todos los sectores. En lugar de tener que hacer reuniones físicas en salas previamente reservadas, se podían hacer reuniones por medio de estas conferencias a distancias remotas mediante llamadas multilíneas y cierto equipamiento hardware. Este tipo de llamadas puede ahorrar mucho dinero a las compañías en viajes y tiempo perdido yendo de un sitio a otro.
Las conference call modernas pueden incluir enlaces de video, como también correos electrónicos en tiempo real y otras funcionalidades para una mejor comunicación.
El segundo significado que se comentaba era más orientado a las finanzas. Uno de los momentos más importantes en el año fiscal de una compañía es el estado de las acciones y valores de la compañía. Esta información normalmente se considera de gran privacidad por lo que solo un selecto grupo de representantes puede asistir las reuniones. Para hacer estas reuniones de una forma controlada y segura, muchas compañías eligen hacerlo mediante una conference call.
Hoy en día, este tipo de conferencias se hacen para prácticamente cualquier temática o asunto. Ya no se trata solamente de importantes reuniones de accionistas o directivos para establecer conversaciones en tiempo real entre varias partes del mundo. Se pueden hacer para reuniones técnicas, poner en marcha nuevos proyectos, asuntos burocráticos, etc.
