Imaginemos por un momento que tienes un comercio de grandes dimensiones y estás teniendo problemas con los hurtos y robos. ¿Qué puedes hacer? No puedes dejar que continúe ya que tu sistema de administración está mostrando que estás perdiendo miles de euros debido a estos robos. Esto te fuerza a subir los precios y eso significa que tienes que cobrar más que el comercio de al lado, es decir, tu competencia.
Esto puede perjudicar tu negocio, especialmente si tu competencia está tomando medidas satisfactorias contra los hurtos. Como un comerciante que se centra en el problema, que se conoce en la industria como prevención de pérdidas, tienes básicamente tres modos de parar los robos:
1- Vigilar a todo el mundo en la tienda como si fueras un halcón y asegurarte de que no roban nada. Puedes hacer esto usando guardas de seguridad y sistemas de vigilancia.
2- Puedes poner las cosas complicadas para los ladrones haciendo que los productos sean complicados de retirar de su sitio, como utilizando cables, en lugares cerrados o fuera del alcance, o con sistemas de bloqueo.
3- Puedes usar un sistema que instale etiquetas especiales para que salte una alarma cuando el objeto salga de la tienda si revisar.
La primera opción en la prevención de pérdidas es el uso de medidas disuasorias tales como guardas de seguridad, espejos de observación (que permite a los vendedores ver todos los puntos de la tienda), y los circuitos cerrados de televisión. Muchos grandes comercios usan una combinación de estas técnicas, que están entre las primeras que se han utilizado para combatir los robos en comercios.
Los negocios más pequeños, con menos recursos para contratar una empresa de seguridad, pueden instalar video cámaras para poder grabar la actividad diaria en la tienda. Mas tarde, el comerciante puede revisar las cintas, observar a los compradores buscando comportamientos sospechosos (algunas veces robando) y notar las vulnerabilidades de la tienda en ciertas áreas o espacios.
El problema con este sistema de grabación y revisión, es que algunos ladrones consiguen salirse con la suya. Por otro lado, los expertos comentan que este método permite el reconocimiento de ladrones reincidentes, lo cual es usual en los típicos robos de tiendas. Revisando estas cintas de grabación, el comerciante puede aprender también nuevas formas de afrontar el problema.
Tu gran comercio imaginario probablemente usaría un sistema de vigilancia electrónico algo diferente que la de un pequeño comercio. Seguramente habría unos empleados de seguridad monitorizando la actividad del comercio por un sistema cerrado de televisión para prevenir actos delictivos. Hoy en día hay sistemas que permiten a los comerciantes con varias tiendas y comercios distribuidos geográficamente, poder ser controlados desde un único punto.
Estos sistemas de vigilancia remotos permiten que las imágenes sean enviadas a tiempo real sobre líneas telefónicas de alta velocidad a otras localizaciones, y almacenar electrónicamente las imágenes de video digitales para revisar y tener como pruebas.
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La CCTV en la seguridad
La próxima vez que vayas a un centro comercial de grandes dimensiones, echa un vistazo a tu alrededor. Las cámaras digitales de alta velocidad y de alta resolución, suelen venir montadas en varios medios como pueden ser los detectores de humo, termostatos, relojes, etc. Hay cientos de manera de montar estos tipos de cámaras, y en cualquiera de los sistemas, podemos tener las funciones de acercamiento y movimiento, para poder hacer un seguimiento de un usuario sospechoso de cometer un robo.
Las videos cámaras usadas para temas de seguridad, no se parecen en absoluto a las video cámaras a las que puedas estar familiarizado – son más pequeñas y mucho más especializadas. Una cámara de vigilancia en un sitio estratégico, puede ser perfectamente de 10 centímetros de largo por 5 de ancho, con las lentes incorporadas en un extremo.
Estas cámaras están diseñadas bajo dos especificaciones muy claras: deben ser pequeñas y fáciles de esconder. En segundo lugar, las cámaras necesitan ser escondidos y puestos en lugar seguro para no impedir que pueda haber cualquier tipo de sabotaje en el sistema.
Para albergar todos los dispositivos y equipamientos, se necesitan cables de seguridad y armarios especializados (racks) para poder que estén seguros y no haya problemas de seguridad. Los cables de seguridad están hechos con una gran variedad de propiedades, como son los cables coaxiales o las fibras ópticas. Lo cierto es que los expertos dicen que los sistemas antirrobo de las tiendas en la actualidad, son los sistemas CCTV y los sistemas de etiquetado con alarmas, mejor conocidas como sistemas EAS (Artículos Electrónicos de Vigilancia).
De forma separada, son dos buenas opciones, pero usadas en conjunción, son algo duro de engañar. El sistema EAS es una tecnología usada para identificar artículos según pasan por una barrera colocada en el centro comercial.
Esta identificación es usada para alertar a las personas correspondientes que se está intentando mover artículos de forma no autorizada. Estos sistemas son muy útiles en cualquier lugar donde existe la posibilidad de que se cometa un robo. Usando sistemas EAS, permite al comerciante poner productos de mayor valor en lugares de riesgo y donde puede ser visto, en lugar de ponerlos en vitrinas o encadenarlos en barras metálicas.
EAS o vigilancia electrónica
Según algunos expertos, las nuevas tecnologías EAS están siendo producidas – no solo para producir los robos en comercios – sino también para aumentar las ventas, reducir costes laborales, acelerar los inventarios, mejorar los almacenamientos logísticos, y par muchas más cosas en un futuro cercano. Pero de momento, hablaremos del papel de EAS en su batalla contra los robos en la tienda imaginaria que hemos hablado al principio de este artículo.
Tres tipos de sistemas EAS dominan la industria de la vigilancia al por menor. En cada caso, una etiqueta EAS es añadido a un objeto. La etiqueta es entonces desactivada, o llevada de un estado activo en el cual pondrá en marcha un sistema EAS, a un estado inactivo donde no activará la alarma.
Se la etiqueta es dura y reutilizable, un dispositivo es utilizado para retirarla cuando un cliente compra el objeto que tiene puesta la etiqueta. Si es una etiqueta desechable de papel, puede ser desactivada pasándole un aparato especial o con un escáner de mano que le “dice” a la etiqueta que el objeto ha sido autorizado a abandonar la tienda. Si un objeto o producto no ha sido desactivado por el vendedor, al pasar por las puertas sonará una alarma. Si se usa en conjunción con un sistema de CCTV, puede ser muy efectivo.
El uso de sistemas EAS no elimina por completo los robos en comercios. Sin embargo, los expertos dicen que los robos pueden ser reducidos en un 60 por ciento o más con un sistema fiable de estas características.
Incluso cuando un ladrón consigue dejar la tienda con un objeto etiquetado, la etiqueta sigue necesitando ser quitada – algo que no es tan fácil como lo solía ser. Por ejemplo, algunas etiquetas EAS contienen cápsulas de tinta, lo cual dañará el objeto robado cuando sea retirado de forma ilícita. Otros componentes populares de tipo EAS incluyen el etiquetado de origen, donde la etiqueta se incluye en el producto en la fabricación.
El tipo de sistemas EAS dictamina como de controlado debe ser un sistema de entrada y salida, y también se determina mediante una etiqueta específica y su tecnología, como determinar el rango de frecuencias par cubrir un área de vigilancia.
Los sistemas EAS ocupan un rango que va desde frecuencias bajas hasta el rango de frecuencias de radio. Los sistemas EAS operan bajo diferentes principios, no son compatibles y tienen ventajas y desventajas muy específicas.
Funcionamiento de la radio frecuencia en la seguridad
Los sistemas de radio frecuencia son muy utilizados en el mundo, y las etiquetas y dispositivos usado para este medio son cada vez más pequeños. Los sistemas de RF funcionan más o menos de la siguiente manera: Una etiqueta – básicamente un circuito electrónico y una antena en miniatura – añadida a un producto, responde a una frecuencia específica emitida por una antena transmisora (usualmente una barrera puesta en la entrada/salida).
La respuesta de esta etiqueta es cogida por receptor adyacente (antena) que normalmente es la otra barrera paralela a la comentada antes. Se procesa la señal de respuesta de la etiqueta y hará saltar una alarma cuando coinciden ciertos criterios.
La distancia entre las dos barreras o pedestales, puede ser de 2 metros aproximadamente. Las frecuencias con las que operan estos sistemas de radio frecuencia generalmente tienen un rango de entre 2 y 10 megahercios, lo cual se ha convertido en un estándar en varios países.
La mayoría del tiempo, los sistema de radio frecuencia usan una técnica de barrido de frecuencias para poder manejar las distintas frecuencias de las etiquetas. En ocasiones, tanto el transmisor y el receptor están combinados en un dispositivo – este método se llama sistema mono y puede aplicar técnicas de barrido o de pulsos, o una combinación de ambas.
Los sistemas mono pueden ser más efectivos si la entrada de la tienda es pequeña. Este sistema se usa con etiquetas duras, la cuales son algo más caras que las etiquetas de papel usadas en la RF de barrido. Las sensores – como realmente se llaman a las barreras/pedestales comentadas anteriormente – emiten un pulso bajo de RF, el cual “escucha” a la etiqueta. Esta tecnología, conocida como procesamiento de señal digital, aprende sobre sus alrededores por lo que puede distinguir con precisión entre la señal de la etiqueta y los ruidos externos en las inmediaciones. Los dueños de las tiendas suelen elegir este método porque virtualmente elimina las falsas alarmas.
Una de las cosas que suelen reclamar los comerciantes a todos los niveles, es por sensores que sean totalmente invisibles. Algunas compañías que se dedican a la fabricación de sistemas de seguridad comentan que es técnicamente posible crear un sistema invisible, por ejemplo instalando una antena circular alrededor de la puerta de la tienda. Sin embargo, algunas pruebas han mostrado que el valor preventivo de un sistema visible es mayor y reduce el número de robos.
Hay muchas maneras diferentes de implementar un sistema de radio frecuencia para temas de seguridad. La idea básica es que la etiqueta tenga una antena helicoidal hecha de aluminio fino conectada a un trozo de papel.
El final de la antena hay un pequeño diodo que causa que la etiqueta emita una señal de radio en respuesta a la señal de radio que recibe. Para desarmar la etiqueta, un fuerte pulso de RF (más fuerte del que emite la barrera) rompe la etiqueta y quema el diodo o componentes internos. Entre las barreras, una etiqueta quemada no emite señales, por lo que se le permite pasar sin ningún tipo de alarma.