Un receptor en un homecinema es el punto central en uno de estos sistemas. Todos los componentes van cableados a este dispositivo y sirve de controlador. El factor más importante al conectar los componentes es asegurarse de que tiene las conexiones de entrada y salida adecuadas. Esto incluye los puertos más nuevos que haya en el momento. Algunos televisores modernos, como son los HDTV, usan interfaces HDMI que combinan video y audio digital. Incluso si tu televisor no tiene este tipo de interfaz, es mejor conseguir un receptor que si lo tenga para estar preparado cuando se quiera comprar un televisor nuevo.
El receptor debería ser capaz de soportar cualquier tipo de interfaz, ya sea analógico u óptico. Tampoco es mala idea que tenga interfaces algo más antiguos para ciertos tipos de cable. Dicho de otra manera, que sea compatible con tecnologías más antiguas para poder ser utilizado en cualquier circunstancia. Mientras que los receptores estéreo solo soportan dos altavoces, los diseñados para los homecinema soportan sonido surround o sistemas con múltiples altavoces.
La configuración más básica es de cinco altavoces y un subwoofer para los bajos. Por supuesto hay nuevas configuraciones donde se pueden aumentar el número de altavoces.
El dispositivo también soportar un segundo conjunto de altavoces de tipo surround. Se puede separar del sistema de altavoces principal, y se pueden poner en otra habitación de la casa, como puede ser un dormitorio o en la terraza para el verano. Para configurar un receptor de manera fácil, busca uno que ofrezca calibración automática. Viene con un pequeño micrófono y un puerto frontal para conectarlo. Se puede poner en una zona donde quieres que el sonido sea perfecto.
Al poner en marcha la aplicación de calibración, el receptor emite una serie de señales y efectos de sonido. Esto mide cuando cada uno de los altavoces que llegan al micrófono. Los canales se ajustan ellos solos al recibir estos sonidos, independientemente de la distancia del micrófono y si le llegan los sonidos al mismo tiempo. Esto crea el “punto perfecto” para que se oiga todo como debe.
Algunas funciones muy comunes incluyen canales de ecualización, mandos para conmutar entre componentes que están conectados, menús para una navegación más fácil, etc. Si estás planeando usan dispositivos móviles, ten en cuenta que tenga puertos auxiliares frontales para no tener que estar dando la vuelta al dispositivo cuando ya esté funcionando. Merece la pena no escatimar en gastar dinero en un receptor de homecinema, ya que tener una buena calidad de sonido es importante.
