Un reproductor 3D es un dispositivo que puede ser conectado a un televisor y otro tipo de monitor para ver películas en 3D y otro contenido similar. Las películas e imágenes que se pueden ver en estos reproductores pueden verse desde varios formatos diferentes tales como DVD o Bluray. Algunos dispositivos pueden ser usados para verse desde Internet mediante “streaming”.
Un reproductor 3D puede ser también un programa de software usado en un ordenador para mostrar el contenido, o para transferir imágenes de dos dimensiones o un formato 3D.
La idea principal en un reproductor de este tipo es dar una sensación más profunda e inmersa al espectador. Esto suele requerir unas gafas especiales y otro tipo de hardware para permitir ver las imágenes de forma apropiada.
Los datos que van integrados en los discos DVD o Bluray están desarrollados especialmente para dar estos efectos tan reales. Un reproductor 3D puede también enviar este tipo de señal en pantallas que lo tienen integrado. Estos reproductores tienen discos duros de forma parecida a un ordenador.
En este tipo de dispositivos, se puede conectar un dispositivo externo al reproductor, como puede ser un pendrive de memoria, y de donde se pueden transferir los datos. Muchos de estos dispositivos tienen la capacidad de enviar los datos en tiempo real desde una red conectada al sistema, incluyendo Internet. Esta conexión puede ser inalámbrica o por medio de cables convencionales.
Hay programas que funcionan directamente en el ordenador, aunque otros tipos suelen necesitar algún tipo de hardware. Antiguamente las gafas que se utilizaban eran las típicas que tenían una lenta roja y la otra azul. Hoy en día aunque ha habido mejoras en este sentido, el sistema sigue siendo el mismo. Cuando vamos a un cine a ver una película 3D nos ponemos estas gafas para sacar el mayor partido a las imágenes. Con un reproductor 3D en casa ocurre básicamente lo mismo. Tener una gafas 3D de buena calidad es importante, sobre todo su vamos a usar este sistema bastante.