na completa tetraplejia es en muchas maneras uno de los peores diagnósticos posibles. Es una parálisis total de cuello hacia abajo que puede ser ocasionado por daños en la columna vertebral o ciertas enfermedades como la esclerosis múltiple. Las personas afectadas quedan totalmente dependientes de otros, pero suelen quedar aislados ya que pierden la facultad de hablar. Muchos de nosotros damos por hecho la habilidad de andar de una habitación a otra, pero para los que realmente están deshabilitados, incluso esta simple acción requiere ayuda de otra persona.
Imagina entonces que una persona pudiera controlar una silla de ruedas con motor simplemente con el pensamiento. Al redireccionar nervios dañados, un dispositivo como este podría abrir muchas puertas a la independencia para los afectados de este problema.
Veremos a continuación como una compañía está intentando hacer que esto sea una realidad. Veremos también que ciertas tecnologías pueden restaurar el habla en personas que no pueden hablar con un simulador de voz.
Cuando realizas una acción física, las neuronas en tu cerebro generan señales eléctricas muy pequeñas. Estas señales se mueven de tu cerebro a todo el sistema nervioso. Cuando llegan al área correcta de tu cuerpo, las neuronas motoras activan los músculos necesarios para completar una acción. Casi todas las señales pasan por el conjunto de nervios dentro de la columna vertebral antes de desviarse a otras partes del cuerpo.
Cuando la columna es dañada o queda seccionada, la rotura en el sistema nervioso previene que las señales lleguen a donde deberían. En el caso de una enfermedad muscular, las neuronas motoras dejan de funcionar – las señales siguen siendo enviadas, pero no hay una manera de que el cuerpo las traduzca en una acción muscular.
¿Cómo podemos solucionar el problema de un sistema nervioso dañado? Una manera es interceptar las señales del cerebro antes de que sean interrumpidas por la zona de la columna vertebral dañada o las neuronas problemáticas. La compañía Ambiente ha desarrollado el sistema Audeo, el cual estaba inicialmente visionado como una manera de que la gente deshabilitada se pudiera comunicar, pero la compañía expandió el sistema de control para que incluyera la habilidad de controlar una silla de ruedas o interactuar con un ordenador.
Este sistema se basa en la idea de que las señales neurológicas enviadas del cerebro al área de la garganta donde se inicia el habla, siguen llegando a esta zona aunque la columna vertebral y las neuronas motoras están dañadas. Incluso si los músculos de la garganta no funcionan apropiadamente, las señales siguen llegando.
Por tanto, aunque no se pueda formar palabras entendibles, las señales neurológicas que representan lo que hablamos, sigue existiendo. Esto se llama habla subvocal. Todo el mundo habla de esta forma – si piensas en una palabra o frase sin decirlo en voz alta, tu cerebro siguen enviando las señales a tu boca y garganta.
Un ligero receptor en la garganta del sujeto – un pequeño conjunto de sensores conectados en el área – intercepta estas señales. Funciona de forma parecida a un electroencefalograma, un dispositivo que recibe señales neurológicas cuando se pone en el cuero cabelludo de una persona.
El sistema Audeo recibe estas señales del habla porque se pone directamente en el cuello y garganta de la persona. Estos sensores detectan las minúsculas cargas eléctricas que representan la actividad neuronal. Entonces encripta estas señales antes de enviarlas a un ordenador.
El ordenador procesa las señales e interpreta lo que el usuario intenta decir o hacer. El ordenador entonces envía comandos a la silla de ruedas o al procesador de voz. Se puede decir que funciona de forma parecida al software de reconocimiento de voz.
Los procesos entre mover una silla de ruedas y hablar por medio de estas señales neurológicas son similares, pero con la silla se deben aprender ciertas frases subvocales que el ordenador pueda interpretar como comandos de control en lugar de palabras habladas. El usuario piensa “hacia adelante” y el procesador interpreta que la señal es de comando para mover la silla de ruedas. Como dato interesante, la NASA está desarrollando un sistema de control subvocal para su uso potencial con los astronautas.
Durante sus paseos espaciales o en la estación espacial, los astronautas trabajan en unos entornos con mucho ruido y haciendo tareas que muchas veces no les permiten tener las manos libres para controlar los diferentes sistemas. Los programas de reconocimiento de voz no funcionan demasiado buen es estas situaciones porque los ruidos de fondo hacen que los comandos de voz sean difíciles de interpretar. La NASA espera que con el uso de señales subvocales, se podrá solucionar el problema.