No es ningún secreto que el ejército de los Estados Unidos investiga y usa algunas de las tecnologías militares más adelantadas del mundo. Integra una alta tecnología y componentes digitales en varios campos, tanto aviones de combate a vehículos de todo tipo. El soldado se beneficia de todas estas innovaciones también.
Muchos soldado que están en primera línea de algunos conflictos, llevan un conjunto de dispositivos de alta tecnología diseñados para mejorar la eficiencia en las operaciones y su seguridad. Estas herramientas digitales ayudan a moverse por zonas que no se conocen, interactuar con la gente local que habla idiomas diferentes, y hacer un seguimiento de los enemigos durante el combate. Y esto solo es el principio.
Las autoridades militares han visionado un futuro donde cada soldado y vehículo estará enlazado a una red en tiempo real. Una red como esta permitirá a los oficiales seguir y monitorizar las actividades y disponibilidad de cada persona, con la meta de reducir esas situaciones donde se pierde el contacto y se sabe muy bien lo que está ocurriendo.
Para esto, el departamento de defensa se gasta millones de dólares en varios proyectos relacionados con la tecnología militar. En ocasiones, estos proyectos derivan en beneficios tanto para los soldados como a los civiles. Otras veces, los proyectos acaban siendo grandes fiascos que se acaban olvidando.
Por ahora, algunas de las tecnologías más efectivas son las que llevan los soldados incluso antes de llegar a su destino. Uno de los programas tecnológicos que se pusieron en marcha, es el programa “Land Warrior” o guerrero terrestre. Este programa estaba diseñado para equipar a los soldados de infantería con varios dispositivos de última generación. La meta era aumentar las habilidades de lucha en áreas urbanas y otras situaciones donde los vehículos acorazados y armas de largo alcance no eran prácticos.
En este programa se equipó a los soldados con ordenadores, receptores GPS, radios, cámaras de video y otros equipamientos, todo diseñado para aumentar la efectividad en el campo de batalla y en los combates individuales. Sin embargo, el programa fue parado en el 2007 debido a algunos problemas técnicos que causaron más inconvenientes que soluciones. Uno de los problemas era que todo el equipamiento pesaba unos ocho kilos, lo cual quitaba movilidad al soldado y le hacía más vulnerable.
Sin embargo y a pesar de las opiniones, un batallón de soldados se llevo este equipamiento a Irak y pasó algo curioso. Cada soldado de forma individual, comenzó a quitar cosas del equipamiento dejando lo más básico y reduciendo el peso mucho, quedándose con las funciones que realmente eran útiles en situaciones de combate.
La función más popular de este programa es el sistema de marcado químico digital, el cual permite a los soldados marcar áreas limpias de enemigos, y así quitar trabajo a otras unidades que llegan a la zona. Otros elementos útiles son la mensajería de texto (aconsejable cuando las radios son difíciles de escuchar) y mapas digitales que muestra posiciones.
A pesar de los problemas del programa, salieron equipamientos muy prácticos. En zonas de guerra, se está usando una versión actualizada de este programa que pesa unos 4 kilos, pero solo es usado por fuerzas especiales. Aun así, el espíritu de este programa sigue vivo. Aunque el programa esta oficialmente cerrado, los componentes de mayor utilidad serán usados en un próximo proyecto muy similar que ya está en marcha.
Equipamiento militar en la tecnología moderna
Uno de los riesgos que tienen los militares es encontrarse en situaciones donde la visibilidad es nula, ya sea por el humo, la oscuridad, zonas urbanas laberínticas, tormentas de arena y muchas más cosas, que pueden ser escenarios muy peligrosos. Los enemigos, especialmente los que se esconden en áreas urbanas no conocidas, pueden ser una amenaza presente en cada esquina.
Sin embargo, ¿qué pasaría si un soldado pudiera detectar al enemigo corriendo a través del humo o detrás de un muro de hormigón? Esa es la idea de los cascos con sistema de radar incorporado que están actualmente en desarrollo.
El programa de cascos con radar incorporado proveer al soldado una visibilidad de total en todas direcciones mediante sensores de indicación que pueden “ver” movimientos de hasta 25 metros de distancia. Todo el sistema debería pesar menos de un kilo, que es la mitad de toda la carga que hay incorporada en el casco.
Con este equipamiento militar, los soldados serán capaces de detectar movimiento que podrían librarles de posibles emboscadas. Al estar el producto todavía en investigación, es difícil saber cómo utilizará los avisos visuales y de audio. Puede que funcione junto a otros dispositivos que lleven en su equipamiento de campaña. Hay también algunos problemas que tienen que solucionar, como el equipamiento expuesto a radiaciones o falsas alarmas provocadas por soldados aliados o simplemente una manada de perros.
Llevar mucho equipamiento de alta tecnología tiene sus inconvenientes. Un dispositivo puede venir con varios accesorios, y todos tienen sus respectivos cargadores. Este es el motivo por el que el ejército quiere agrupar los diferentes dispositivos en un ordenador de muñeca.
Con la ayuda del fabricante de ordenadores HP, el laboratorio de investigación del ejército americano está trabajando en este tipo de ordenador, el cual solo debería pesar algo más de 200 gramos. La base de este dispositivo es su pantalla flexible de unos pocos centímetros. Está compuesto de una finísima capa de transistores funcionan con la pantalla electrónica, la cual cambia las señales de datos en imágenes en escala de grises.
El fabricante de ordenadores HP usa su tecnología para poner estampar los componentes electrónicos de y pantalla directamente en un plástica flexible, Quitando un maltrato extremos sobre el dispositivo, este ordenador enrollado a la muñeca del soldado debería soportar condiciones duras y seguir funcionando sin problemas. La pantalla también usará menos energía de lo normal, por tanto reduciendo continuas sesiones de carga.
Teniendo este ordenador añadido como si fuera un reloj, se convertirá en un punto central para enviar y recibir información esencial por medio de transmisiones de datos y radio, entre otras tareas. Este dispositivo tendrá también varios usos comerciales, desde teléfonos móviles, pantallas de televisión, libros virtuales, etc. Hay en marcha una versión con pantalla en color.
Como se ha dicho, todas las herramientas de alta tecnología requieren energía, y bastante. En zonas de combate donde los suministros de energía pueden estropearse o estar poco accesibles, es un problema que puede ser grave. Cuando el equipamiento miliar se queda sin batería, los soldados deben volver a la base para recargar todos estos dispositivos críticos, como pueden ser visores de visión nocturna, radios, ordenadores, detectores de minas, infrarrojos y otras herramientas.
Para encontrar nuevas soluciones a este desafío, el departamento de defensa ha elegido invertir en las envases de combustible M-25. Este dispositivo es una fuente de energía que se puede llevar encima que combina directamente tecnología de metanol con sistemas de envases de combustible.
El resultado es una batería que es un ochenta por ciento más ligera que las baterías convencionales, pero da una energía constante por más de setenta horas. Puede también dar un continuo flujo de electricidad de al menos veinte vatios que puede llegar a los doscientos. Esto es un impresionante avance, ya que es tres veces más de lo que actualmente están transportando los soldados. También es suficiente potencia como para mantener los sistemas de comunicación y navegación funcionando durante más tiempo sin tener que volver a la base.
